La seguridad alimentaria nos protege de enfermedades transmitidas por alimentos, como intoxicaciones alimentarias, infecciones bacterianas y otras complicaciones relacionadas con la ingesta de alimentos contaminados.
Para que garantizar la seguridad alimentaria y cumplir buenas prácticas, empieza desde los agricultores cuando implementan técnicas adecuadas de cultivo, como el uso responsable de fertilizantes y pesticidas, para garantizar que los alimentos sean seguros desde su origen. El control de plagas, la higiene y el manejo adecuado de los animales también son aspectos fundamentales.
Durante el procesamiento y la manipulación de los alimentos, se deben seguir estrictas normas de higiene. Esto implica la limpieza regular de las instalaciones, el control de la temperatura y el tiempo de almacenamiento adecuados, así como el uso de utensilios y equipos limpios y seguros.
Los alimentos deben estar etiquetados de manera clara y precisa, proporcionando información esencial sobre su contenido, fecha de caducidad, instrucciones de almacenamiento y posibles alérgenos. Esto nos ayuda a tomar decisiones informadas y evitar cualquier riesgo para nuestra salud.
Las autoridades sanitarias realizan inspecciones y controles regulares en los diferentes puntos de la cadena alimentaria para asegurarse de que se cumplan las normas de seguridad. Estas inspecciones abarcan desde las granjas y fábricas de procesamiento hasta los restaurantes y supermercados.
La educación y la concientización son fundamentales para garantizar toda la cadena de acción. Es importante que los consumidores estén informados sobre cómo seleccionar, almacenar y manipular adecuadamente los alimentos en sus hogares.
Los consumidores, también tenemos un papel importante que desempeñar. Al comprar alimentos, debemos revisar las fechas de caducidad, verificar que los productos estén bien envasados y almacenarlos adecuadamente en casa. Además, debemos lavarnos las manos antes de cocinar y asegurarnos de cocinar los alimentos a temperaturas seguras.
Como podéis comprobar, es un esfuerzo conjunto que implica la colaboración de todos los actores involucrados en la cadena alimentaria.